El dilema del prisionero
La Teoría de Juegos es una rama de las matemáticas que estudia el comportamiento de los individuos cuando interactúan entre ellos mediante una serie de reglas bien determinadas. El llamado Dilema del Prisionero es uno de los ejemplos más comunes de este tipo de problema, que tiene cientos de aplicaciones en la vida diaria. En el fondo, plantea la cuestión de si es más “rentable” ser altruista o, por el contrario, aquellos que son altamente egoístas son los que finalmente salen ganando. Los resultados son sorprendentes.
La Habitación china y la inteligencia artificial
La habitación china es un experimento mental, popularizado por Roger Penrose, que intenta rebatir la validez del Test de Turing a la vez que plantea que una máquina es incapaz de llegar a pensar. Expone la diferencia que existe entre reconocer la sintaxis y comprender la semántica, proponiendo que una habitación cerrada con un mecanismo dotado de la cantidad suficiente de reglas puede hacerse pasar por una persona. Pero, ¿tiene ese sistema algún tipo de conciencia o “mente”? El experimento plantea que la mente humana no funciona como un programa de ordenador, ni un programa de ordenador puede ser una mente. Sigue leyendo, quizás no seas más que una pobre máquina que cree que existe.
El problema de la Bella Durmiente
Los filósofos y matemáticos a menudo evidencian una habilidad especial para complicar las cosas. Un buen ejemplo de esto es El problema de la Bella Durmiente, una vuelta de tuerca que convierte un cuento para niños en una pesadilla para adultos. Sigue leyendo, y averigua por qué las brujas no deberían tener monedas, los príncipes ya no besan como antes y -sobre todo- cómo un par de cerebritos pueden encontrar una paradoja dentro de un cuento para niños. Sin desperdicio.
La lotería de la supervivencia
En 1975, el filósofo John Harris publicó un texto denominado “La Lotería de la supervivencia”. En él imaginaba un futuro en el que cada persona poseía un número, y cuando se necesitaban órganos para efectuar trasplantes destinados a salvar la vida de dos o más personas, alguien era seleccionado al azar, asesinado y sus órganos compartidos entre aquellos que los necesitaban. ¿Es una locura imaginar algo así? Puede ser. Sin embargo, puede demostrarse que este mecanismo ofrece una mejor esperanza de vida que cualquiera de los planes de salud actuales...
El problema de los dos sobres
Imagina por un momento que se te acerca un desconocido y te entrega un sobre cerrado con dinero en su interior. Y que, antes que puedas reponerte de la sorpresa ante semejante actitud, te ofrece cambiarlo por otro que lleva con él, sabiendo que el nuevo sobre puede tener o bien el doble de dinero que el otro, o bien la mitad. ¿Qué deberías hacer? Si alguna vez te encuentras ante tan poco probable situación, estarás enfrentando el problema de los dos sobres, una curiosa paradoja estadística que debes conocer.
El problema del caballo
El llamado “Problema del caballo” es un antiguo problema matemático relacionado con el ajedrez. Consiste en encontrar una secuencia de movimientos -válidos- de esta pieza para que recorra todas las casillas del tablero, visitando cada una solo una vez. Verdaderos ejércitos de matemáticos han encarado este problema, pero sigue sin conocerse el número exacto de soluciones que existe. El problema ha sido planteado para tableros de diferentes tamaños y distintas condiciones iniciales, y sigue siendo tan atractivo como hace 1200 años.
El problema del ángel
El prolífico matemático John Horton Conway, muy conocido por sus aportes a la teoría de conjuntos , de nudos, de números, de juegos y de códigos, propuso el denominado “problema del ángel” en 1982. Tiene dos jugadores -el ángel y el demonio- y se juega sobre un tablero de ajedrez de tamaño infinito. Sus reglas son muy sencillas, y el diablo debe intentar confinar al ángel mientras este evita ser atrapado. Pero la verdadera dificultad de este problema consiste en determinar si existe una estrategia tal que asegure que uno de los dos contrincantes pueda ganar siempre.
WhatIsHang: ¿Por qué dejó de responder ese programa?
Las aplicaciones fallan. Está en su esencia y es parte de la experiencia de cada uno de nosotros con cualquier tipo de sistema operativo. En Windows, el famoso XXXX no está respondiendo es un visitante periódico y por más que nos imaginemos muchas cosas, siempre nos queda latente la pregunta sobre por qué dejó de responder ese programa. Para analizar las causas y ponerlas a tu alcance está WhatIsHang, una aplicación gratuita de Nirsoft que te responde cuando las aplicaciones no lo hacen.