El tirador de un cajón, una bisagra de bajo costo, la tapa para las baterías del mando a distancia… ¿cuántas piezas de plástico arrojan la toalla antes de tiempo? El verdadero problema es que sus fabricantes suelen decir algo en la línea de «muchas gracias, hasta luego» cuando tratamos de obtener un reemplazo, pero el portal My Mini Factory sale al rescate con una muy interesante lista de partes gratuitas que pueden ser descargadas e impresas en 3D.

En nuestra primera entrega de páginas Web para descargar archivos STL y modelos 3D, han quedado afuera varias plataformas que son muy interesantes. Los repositorios de modelos 3D que te listaremos en esta segunda entrega son gratuitos y cuentan con una gran base de datos de modelos imprimibles en 3D. También podrás: Descargar y vender tus archivos STL, conseguir modelos para impresoras 3D Zortrax, disfrutar de tutoriales para construir diseños 3D, entre otros tantos servicios.

En la primera entrega de los: “Programas gratuitos para impresoras 3D”, quedaron afuera varios entornos. Por este motivo, hemos decidido recomendar otras cinco plataformas para que no solo conozcas más servicios, sino para que comprendas el papel de cada programa en el proceso de una impresión 3D. Te presentaremos utilidades de corte de código, herramientas de modelado 3D, host para tu impresora y un potente gestor para impresoras.

Apenas tenemos una impresora 3D instalada, y la búsqueda de modelos se transforma en una campaña fascinante. ¿Por dónde empezamos? ¿Qué podemos hacer? ¿Hay algo para reparar que necesite una pieza de plástico? Thingiverse es una de las primeras paradas en la Web, y después encontramos portales como My Mini Factory que también ofrecen repuestos, pero hoy es el turno de Smithsonian X 3D, que se suma al grupo con más de 100 modelos 3D gratuitos de piezas históricas, fósiles, y otros objetos interesantes.

Desde hace mucho tiempo creemos que la tecnología de impresión 3D debe bajar sus precios si quiere incrementar los niveles de adopción… pero nunca imaginamos que se llegaría a un costo así tan rápido. La gente detrás del proyecto 101Hero promete una impresora 3D lista para usar a un valor de 49 dólares, y todo lo que debe hacer el es cargar el modelo a imprimir en una tarjeta de memoria SD. La gran duda, es si algo así puede convertirse en realidad.

Comprar una impresora 3D no es una tarea sencilla, y si tenemos en cuenta el estado de mercados específicos como el español, es lógico asumir que la variedad brilla por su ausencia. Sin embargo, eso no nos detendrá en la búsqueda de nuestra impresora 3D ideal. Hoy vamos a sugerir cinco modelos a los que podemos comprar «ya», sin ninguna clase de crowdfunding en el medio. Desde plumas 3D hasta máquinas DIY, las diferencias en especificaciones y precios deberían ser lo suficientemente amplias como para adaptarse a cualquier .

Las impresoras 3D prácticamente han invadido al mundo del crowdfunding, y son cada vez más los proyectos que buscan llevar modelos sencillos y económicos al mercado, pero también existe el deseo de expandir las funciones de estas impresoras, y así nos encontramos con Trinus. Gracias a un diseño modular y una base de 299 dólares, Trinus se perfila como una excelente alternativa, sin embargo, aquellos que deseen incorporar soporte para grabado láser podrán hacerlo con apenas un módulo adicional.

Las primeras impresoras con tecnología de chorro de tinta valían una verdadera fortuna, pero con el tiempo fueron mejorando sus métodos de fabricación (y sus números) hasta convertirse en una opción relativamente accesible. Hoy podemos decir algo muy similar de las impresoras 3D, y quien esté buscando un modelo económico para «mojarse los pies», debería mirar más de cerca a la impresora XYZprinting Da Vinci Jr., cuyo precio no supera los 350 euros.

En estos días, las impresoras 3D tienen dos desafíos por resolver: Incrementar sus niveles de precisión, y bajar su costo general. El progreso tal vez parezca ser demasiado lento para algunos s, pero estamos llegando ahí, y en el camino encontramos a productos como OLO, que combina los elementos más importantes de una impresora 3D con un smartphone, garantizando un alto grado de portabilidad, a un precio que probablemente no tenga rival en el mercado.

La imaginación y creatividad de muchos niños (y adultos también) está pronto a hacerse realidad. ThingMaker es la impresora 3D de Mattel que permitirá a los chicos diseñar y crear sus propios juguetes.

Uno de los aspectos más positivos que posee el concepto de impresora 3D es la enorme cantidad de materiales con los que se puede trabajar. Tinta conductiva, hormigón, metales, e incluso comida se han unido a la versatilidad del plástico, dando lugar a toda clase de proyectos. Uno de ellos es Pylos, proveniente del Instituto de Arquitectura Avanzada de Cataluña. Su objetivo es crear un sistema de impresión 3D a gran escala, utilizando un material biodegradable y de muy bajo costo como es la tierra.

Adornos. Repuestos. Prótesis. Implantes. Comida. Órganos. Casas. Vehículos. Instrumentos. La versatilidad de la impresión 3D está alcanzando niveles escalofriantes. Los fabricantes no paran de eliminar bordes filosos, y honestamente no podemos visualizar un techo para esta tecnología. ¿Qué aparece ahora en la lista? Ropa. Los responsables de la impresora Electroloom prometen faldas, camisetas, gorras, y hasta vestidos para niñas, sin necesidad de coser tras la impresión.

La impresión 3D es un proceso complejo que demanda grandes esfuerzos por parte del . Calibración, filamentos, temperatura, fallos y nuevos intentos definen actualmente a esta tecnología. Sin embargo, un grupo de investigadores de la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill creó a CLIP, un avanzado sistema de impresión 3D que «cultiva» a la pieza en vez de hacerla capa por capa, utilizando luz ultravioleta y un medio líquido.

Las fotocopiadoras, y la xerografía detrás de ellas, han cambiado para siempre la forma en la que duplicamos textos y documentos. Ahora, si nos trasladamos al mundo de la impresión 3D, la única manera de crear el equivalente a una fotocopiadora sería integrando un escáner 3D a la impresora. Así es como nos cruzamos con la Blacksmith Genesis, una impresora 3D equipada con un escáner láser que digitaliza e imprime toda clase de objetos.

Los ejemplos más frecuentes de impresión 3D se limitan a simples adornos o pruebas de concepto que no tienen ninguna utilidad específica. Lo que en realidad estamos esperando es una aceleración de la llamada impresión 3D funcional, y para ello necesitamos máquinas como la Voxel8, una impresora 3D que además de trabajar con plástico, también es compatible con una tinta conductiva especial, permitiendo así la creación de circuitos impresos.

Hewlett-Packard ha realizado algunas modificaciones de muy alto perfil en su estructura, pero eso no le impide explorar un mercado cada vez más competitivo e interesante como es el de la impresión 3D. Después de algunas demoras en su anuncio, llega la Multi Jet Fusion, una impresora 3D que promete ser hasta diez veces más rápida y precisa que otros modelos con características similares.

Construir casas y edificios usando impresoras 3D gigantes no tiene nada de absurdo. Durante los últimos años hemos visto iniciativas personales y profesionales, que buscan revolucionar la industria de la construcción aplicando mecanismos más veloces y económicos. Durante la Maker Faire que se llevó a cabo en Roma a principios de este mes, la gente de WASP presentó una impresora 3D para fabricar casas en zonas rurales, a base de barro.

Fabricar un arma de fuego no es una prioridad para la gran mayoría de nosotros, pero al otro lado del charco, donde la “cultura” de las armas se encuentra más desarrollada, la idea está teniendo cada vez más apoyo. Para responder a la peculiar demanda, la gente de Defense Distributed ha lanzado a Ghost Gunner, una máquina CNC que fabrica el receptor del rifle AR-15.

La alianza entre la impresión 3D y el hardware open source se fortalece día a día. El proyecto RepRap tal vez sea el ejemplo más nombrado entre los medios, pero no es el único allá afuera. Ahora, el fundador de Arduino Massimo Banzi ha anunciado a la nueva impresora 3D Arduino Materia 101, basada en el Arduino Mega, y con un diseño completamente abierto.

La magia de las impresoras 3D no tiene pausa. Desde juguetes hasta órganos, pasando por comida, prótesis, vehículos e instrumentos musicales, la lista se hace cada vez más grande a medida que pasa el tiempo. En varias ocasiones hemos hablado sobre el uso de impresoras 3D para construir casas y edificios, pero un hombre en Minnesota llevó ese concepto al extremo, e imprimió un castillo de hormigón.

Un ejemplo contundente de desperdicio post-consumo está en el plástico PET, de amplio uso en la fabricación de botellas. Todo el PET que entre en o con alimentos debe ser “limpio”, pero podemos hacer muchas cosas con el PET ya procesado, incluso imprimir en 3D. EKOCYCLE Cube es una impresora 3D que utiliza cartuchos de material compuestos por una cantidad de PET reciclado equivalente a tres botellas de medio litro.